Seguro que muchos de vosotros/as habéis bebido alguna vez vino de la marca Jean León, bodegas que el propio fundador confió a la familia Torres en el año 1994 cuando murió. Sin embargo el vino sigue manteniendo si esencia y elegancia con su aroma característico de toda la vida.
Hoy os vamos a contar de donde nacen estos vinos, esta marca, reconocida a nivel mundial, y la vida de su creador, la dura lucha constante que tuvo toda su vida el que conocemos como Jean León, pero que, en realidad, su nombre original era Ángel Caferino Carrión Madrazo, nacido en Santander el año 1928.
Aquí os dejamos la historia de Jean León, de Santander a Hollywood, de la nada al todo, con esfuerzo y constancia.
La vida de Jean León siempre se vio envuelta de problemas y de superaciones, debido a que superó con creces todos los obstáculos que le planteó la vida. Ángel tenía 8 hermanos y vivían en Santander, pero la noche en la que un incendio destruyó y quemó la casa familiar sin dejar nada más que cenizas, la familia decidió mudarse a Barcelona en busca de una nueva vida, los padres y los nueve hijos. Una vez en la ciudad Condal, fallece el padre en el año 1941 debido a que el barco en el que se encontraba fue abatido, duro golpe para Caferino, que empezó a trabajar en una empresa de camiones.
En el año 1947 decide irse a Francia caminando a través de los Pirineos con unos amigos a buscarse ahí la vida, donde trabajó de camarero. Se le prohibió la entrada a España debido a que se le consideró prófugo al no volver a España cuando se le citó y no apoyar el régimen de Franco.
Es entonces cuando decidió viajar a Guatemala para trabajar y vivir cómodamente, pero antes de embarcar, le faltaban papeles necesarios para viajar a América, cosa que le llevó a irse solo a París a conseguir dichos papeles. Es decir, el primer intento de marcharse de Europa le salió mal, pero nunca se dio por vencido y fue a buscar una solución. Nunca le dieron esos papeles para poder ir a Guatemala, así que intentó hasta 8 veces poner rumbo en barco hacia Guatemala, consiguiéndolo octava vez. Se embarcó como polizón en un barco que, en realidad, sin él saberlo, iba rumbo a Nueva York.
En el año 1949 Jean León llegó a USA y se puso a trabajar como friega-platos en un pequeño restaurante de un primo de su padre, además también trabajó de taxista después de recibir la nacionalidad con un nombre diferente al suyo original. En el 1951 empezó a trabajar por la noche en el restaurante Villa Capri de Frank Sinatra y Joe Maggio, y combinaba este trabajo con el de taxista durante el día. Forjó un vínculo de confianza con Frank Sinatra, quién le presentó a infinitas celebridades y le enseñó lo que era el mundo de los famosos, así que Jean León empezó a hacerse amigos de estrellas de la talla de James Dean, quienes se asociaron para abrir un restaurante en Hollywood, en el 1955 falleció Dean debido a un accidente de tráfico y Jean León queda realmente tocado debido a la gran amistad que compartieron.
No fue hasta el año 1956 cuando León abrió las puertas del maravilloso restaurante «La Scala», situado enfrente del restaurante de Frank Sinatra. Acudieron todos los famosos del momento, era el restaurante de moda y el más exclusivo de Hollywood, todo el mundo quería visitarlo debido a que fue el precursor de la «nueva cocina» y además tenía una bodega con un amplia cantidad de vinos, entre los que se podían encontrar los mejores del mundo.
De hecho, la última cena de Marilyn Monroe fue del restaurante de León, pidió a domicilio comida para la cena y pocas horas después falleció.
En el 1962 viajó a Barcelona para visitar a su familia y de paso aprovechó para comprar unos terrenos en el Alt Penedés (zona de viñedos conocida por sus vinos de calidad). Per Jean León no hizo lo que todos hacían, sino que sustituyó las cepas locales por vides de Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc y Chardonnay, plantación que se llamó Vinya La Scala0, inauguró la bodega un año más tarde y ahí empezó su reinado en el mundo de los vinos. La revista «Wine» publicó que los vinos de Jean León estaban entre los mejores 8 del mundo entero. Un éxito rotundo.
Para su desgracia, en 1994 le diagnosticaron cáncer, debido a que fumó casi toda su vida, al ver la gravedad de su enfermedad, confíó sus bodegas a la familia Torres. Falleció el mismo año que le diagnosticaron la terrible enfermedad.
A día de hoy Jean León (los vinos) siguen manteniendo la filosofía del propio Jean León, se conservan todos los valores del creador y no se ha cambiado nada, las producciones son las mismas, y el vino es distintivo, como siempre lo ha sido. Así que, podríamos decir que a Caferino la vida le dio la espalda en muchas ocasiones, pero el simple hecho de no rendirse fue lo que le llevó al éxito, creador innato, artista y espabilado, son solo algunas de sus virtudes.